20.2.12

Recupérate

¿Cómo es una bicicleta nueva?
Nunca he visto nacer a estos seres tan grandiosos
Aparatos que te adosan al movimiento

Me pregunto si mientras más jóvenes te podrán llevar más lejos
Entre tanta alucinancia alcancillada en los altillos
¿la cabeza funcionará mejor cuando todo el panorama se sacuda?

Hace poco te has caído. Te tengo que arreglar, y tengo que partir pronto
tengo que empezar el movimiento antes que se desprenda el engrasado óxido
de mi órgano oxímoron que bombea improntas. Pero, bicicleta, ese no es tu asunto.

Tú quisieras nacer. Yo quisiera que tu movimiento me deje en Singapur
Y yo te doy vida, cada vez que siento que vuelo estrujando mi sudor a mis axilas que no se elevan
y mi perfume que me enfrasca en una necesidad de refresco, me abandona, me olvida.

Tú te irías sin mí. Te irías con cualquiera. Pero nadie te conduciría tan cargado de sentimiento
nadie susurraría encima de ti un llanto con sonrisas engastadas
nadie bailaría encima tuyo como yo. Todo junto en un descuido atrevido.

En una verborragia de palabras que se chorrean por el camino, que todo el mundo ve
La muerte nos persigue siempre, pero por suerte somos muy veloces
y la entretenemos con esas palabras que caen sudorosas en el pavimento.


No hay comentarios:

Publicar un comentario