Solo quiero. Insomne me he quedado sentado la lámpara encendida los ojos como a punto de llover hinchados si pudiera solo si pudiera contigo y quitarme todas las comas que se han incrustado en mi pecho quitándome el ritmo las pausas el sentido y pensando atropelladamente en escribirte algo que quisieras leer murmurando y que te dé ganas de contestar. Yo podría quitar así mis espinas casi como si fuera un juego insano y clavar ese dolor en hojas y hojas como lo venía haciendo sin darme cuenta hasta que he estado sentado a estas horas de la madrugada con el lapicero en la mano rayando un bloc con versos inconsistentes puro polvo que no se hace y pensar qué hacer con tantas líneas y párrafos que solo quieren echar una siesta en tu mente y están inquietos en el papel rimando con tu nombre esperando que no se les condene al protocolo de la indolencia es agotador y muy desilusionante. Soy estúpido lo sé consciente y quizás no tanto de cuanto palpito para ti entre hora y hora que no duermo y que al menos este fin de semana he estado nublado más que de costumbre.  Si la solución más fácil es desaparecer cuando nos convertimos en cactus sin ritmo sin pausas para mirarse a los ojos y dejar que ellos se abracen los nervios con tanta fuerza que nos duela separarlos entonces esta vez fabricaré mi propia solución. Un esperpento muy capaz de volar y llevarte de paseo por los mundos que señalen nuestros pies que anhelan correr si solo nos desvestimos las excusas y la rabia y repito y repites el inicio pronunciándome esta vez.